lunes, 18 de abril de 2011

Familias diferentes



(Desde el marco social de México y varios países latinoamericanos)

Por: Verónika Alejandra Inclán Cazarín



            Tan acostumbrados estamos al concepto de familia tradicional y en marcado en el contexto religioso de “la sagrada familia” (José, Maria y Jesús), que cualquier otro tipo de familia nos parece algo no bien visto.

            Un caso muy concreto es la familia donde no es papá, mamá e hijos, sino papá, papá e hijos, o mamá, mamá e hijos. Y sobre ello ¿cuál es el primer pensamiento negativo que salta a la mente? El hijo criado por gays se le conducirá a ser gay.

            Ante esto me pregunto  en primera instancia ¿sería tan malo que el niño se “hiciera” gay? Y en segunda instancia ¿por qué si la mayoría de los homosexuales adultos de está época fueron criados por padres heterosexuales, no se convirtieron en personas heterosexuales?

            Si la crianza es tan determinante como muchos piensan, resulta muy extraño que una persona homosexual criada por padres heterosexuales (papá y mamá) no sea heterosexual, en otras palabras la homosexualidad seria un mito si esto fuera así. Entonces por qué pensar que si sería determinante si es criado por lesbianas o chicos gay

            En al actualidad y desde hace muchos años existen las familias diferentes, sólo que la sociedad conservadora mexicana aún censura muchas de esas familias, como madres solteras, papás solteros (son los menos, pero si los hay), niños criados por los abuelos, niños de padres divorciados con padrastro o madrastra y medios hermanos. Estos ejemplos no encajan en “la sagrada familia”, pero no por ello dejan de ser familia

            Ahora también están los niños adoptados, que crecen al lado de una pareja que por diversas razones no han tenido hijos propios o ha querido agregar un miembro más a su familia, ellos también son familia, aún cuando no les una un lazo sanguíneo.

            Y las nuevas familias que se están presentando de personas gays que adoptan, también son familia.

            Una razón más de que la sociedad se oponga a que los gays adopten, es que creen que obligaran al niño  a tener “perversiones” con ellos. Piensan: si a un varón gay le gustan los hombres y el infante adoptado es niño, querrá abusar del niño. Este pensamiento entonces debería llevarnos pensar que por lógica, el papa heterosexual que adopto una hija, querrá abusar de ella, porque si le gustan las mujeres y la infante que adopto es niña, lo más seguro es que la violara.

            Para muchos este último razonamiento les parecería absurdo, mas esa visión haría por lógica absurdo el primer pensamiento.

            Los principales abusos a niños y niñas se dan por personas que se han manifestado abiertamente heterosexuales. Existen muchas expresiones comportamentales de la sexualidad humana, pero el ser homosexual o lesbiana no va ligado a la pederastia, puede presentarse, sin embargo no es una regla. Además las instituciones que se encargan de las adopciones, a papás heterosexuales, llevan un seguimiento continuo al infante en los primeros años de haber sido adoptados; de que estén bien cuidados, de que se les de una educación y alimentación, de que no sean maltratados. Ante señas de alguna anomalía estás instituciones pueden disponer el quitar temporalmente la custodia del niño para la investigar o hacerla definitiva. En el caso de una pareja gay, no serian la excepción a estos lineamientos

            Un factor más que influye a estar encontrar es lo que sufrirá el niño en la escuela, las burlas de los compañeros y las preguntas que ellos harán a su condicipulo. Y es aquí donde cojea algo en el sistema educativo de este país: la falta de información y educación sexual de los niños a temprana edad.

            Yo recuerdo haber visto sobre sexualidad en la materia de ciencias naturales hasta sexto año de primaria, y todo se concretaba  a decir como funciona  el aparato reproductor del hombre y el de la mujer, en si nada desde el punto de vista social ni cultural. El descubrimiento de la sexualidad se da desde que nos damos cuenta que niños y niñas somos diferentes, ahí es desde donde debería partir la educación sexual, no sólo de manera vaga por unos padres que no tienen ni idea de cómo explicar, y que además enseñan todo erróneamente, como el nombrar incorrectamente el nombre de los genitales, diciéndoles “tu cosita” o “el pipi”.

            No se puede hablar abiertamente de sexualidad con un niño, pero tampoco se ha inventado por la secretaría de educación un método pedagógico adecuado para el comienzo de explicaciones que puedan ser comprendidas por una mente infantil.

            Un niño aprende en su casa educación sexual desde el punto de vista social, al ver ciertas manifestaciones, por las cuales pregunta y los padres les responden de manera vaga, poco precisa o inculcándoles que esos temas no son buenos para que los sepan a su edad.  Por ello ante alguna muestra evidente del amor entre un hombre y un hombre (ver a hombres abrazándose o teniendo un geste cariñoso de pareja), les dicen que esas cosas son “cochinadas”, “puteria”, “perversión”, colgando un gran numero de etiquetas negativas a este tipo de expresiones. Pocas veces veremos una explicación tolerante de los padres ante algo que consideran una “aberración”

            Nuestra pobreza cultural no nos deja explicarle a los hijos cosas tan básicas, como el de dónde vienen los bebes. Se han inventado el mito de la cigüeña y algún otro tipo de cosa similar. A mi me dijeron que los traían los aviones. En la actualidad se ha puesto de moda decir que se descargan de Internet. Lo extraño viene cuando mamá se embaraza y tiene una enorme barriga y el infante se pregunta la relación de esta con el hermanito que será descargado de Internet o que será traído por la cigüeña o por el avión.

            En si la educación haría más llevadera la vida de niños que viven dentro de familias diferentes, y no sólo familias gay, sino también para hijos de madres solteras o padres divorciados. La verdadera educación debería mostrar desde un enfoque pedagógico  (sin prejuicios sociales) lo que son estás otras familias. Sin embargo esto es algo que se  aprende mediante preguntas hirientes ¿tú por qué sólo tienes mamá, dónde está tu papa? En el caso de hijos de madres solteras ¿Por qué tienes dos mamás? ¿Por qué tu papá se besa con un señor? En el caso de hijos adoptados por parejas gays o lesbianas

            Yo sufrí mucho en la escuelas por ser diferente, no sabía que pasaba conmigo, ni los demás sabían, pero mis compañeros notaban algo raro en mi (yo soy transexual, algo que descubrí mucho tiempo después y que hasta mi vida adulta acepte). Fui el blanco de muchos maltratos psicológicos y físicos (golpes)  por niños desde 5 años en adelante, que no me bajaban de puto, choto o maricón.

            Hoy me pregunto si la educación hubiera hecho una diferencia, y es algo que no lo sé ni lo sabré, sin embargo creo firmemente que la educación puede hacer algo por las actuales generaciones.

            Lo triste es que la sociedad actual aún sigan prefiriendo que muchos niños mueran de hambre en la calle antes de ser adoptados por homosexuales, como afirmara la cantante “paquita la del barrio”. Y en el mejor de los casos prefieren que sean hijos de drogadictos, alcohólicos, ladrones, narcotraficantes, o cualquier otra cosa mientras sean heterosexuales, antes de ser hijos de algún maricón

            El que se quieran ocultar las “cosas” diferentes que existen en la sociedad no quiere decir no existan, y más vale aceptar y tolerar algo que los prejuicios no pueden detener. Esta es la realidad, existe una diversidad y esa diversidad tiene derecho a la felicidad de una familia, aunque no encaje en “la sagrada familia”.